Cada 15 de mayo se reconoce la
importancia de la tarea que realizan hombres y mujeres para hacer posible la
provisión de un servicio tan esencial para la vida como es el agua. Transcurrida la mortífera
epidemia de fiebre amarilla de 1871 se constituye la Comisión de Aguas
Corrientes, iniciándose activamente en 1873 los trabajos proyectados para
servir a 400 mil habitantes en Buenos Aires, incluyendo además el alejamiento
de las aguas servidas por medio de una red pluviocloacal.
El 15 de mayo de 1874 fueron
inaugurados los primeros servicios de salubridad en Buenos Aires al comenzar
las obras para la construcción de la planta potabilizadora de Recoleta,
logrando abastecer, dos años después, al 50 por ciento de la población.
Las obras fueron de tendido de
cañería de conducción, conjuntamente con una toma de agua cruda. El sistema
preveía además dos tanques elevados para almacenamiento y distribución.
En 1958, al tomar vigencia el
primer Escalafón Único, Funcional y Móvil, se fijó la fecha citada como Día de
Obras Sanitarias y del Trabajador Sanitario.
En este sentido, Aguas Riojanas
se adhiere a la celebración y saluda a quienes con responsabilidad y esfuerzo
trabajan cada día por el servicio que contribuye a la calidad de vida de la
población riojana.
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